Queridísimas alumnas hijas de ésta ESCUELA DE SEÑORITAS, me llena de gozo comentarles que nuestro promedio de visitas es de más de 100 diarias, eso gracias a ustedes alumnas fundadoras de la ESCUELA PARA SEÑORITAS. Hemos pasado ya las 3000 vistas y nuestro pronóstico es que duplicaremos ese número durante el mes que viene. Gracias, muchas gracias por leérnos, por comentarnos y por recomendarnos y compartirnos con sus amistades y familia. Si tienen una duda o quisieran que se tocara algún tema en partícular no duden en escribirnos a: lalesbianasuperiora@gmail.com
Estamos por cumplir nuestro primer mes de vida en ESCUELA DE SEÑORITAS por lo que estamos por terminar el LESBOCEDARIO.
Hoy nos toca la letra Y, y sin duda la primera palabra que nos viene a la mente es nuestra favorita en la vida: YO. Nos atrevemos a empezar tantas frases con YO, primera persona del singular. Y bueno YO tendrá tantas definiciones como personas en el mundo, puedo ser yo, pero en otro momento serás tú, en fin. En psicologia los freudianos consideran que la persona se divide en YO, SUPER YO, Y ELLO y las personas están constantemente luchando entre dos impulsos, uno es acrecentando su libido, esto es, buscando satisfacción sexual en contra de frustración que les hace inclinarse por esa terrible pulsión hacia la muerte que vivimos todos. No vamos a entrar en detalles sobre muerte porque francamente en México estamos literalmente sembrados de muertos, ya para donde voltéemos hay un panteón.
Yo es la persona que estamos formando en esta ESCUELA DE SEÑORITAS en cada una de ustedes que al asistir a su clase diaria con LA LESBIANA SUPERIORA o con sus maestros o sus amigos, cada que creamos una mujer homosexual liberada de prejuicios y tabúes nuestra misión ha sido cumplida. Pues ella dirá
Yo soy lesbiana con orgullo y respeto en lugar de ser ese secreto que le dice a la gente cuando ya le tiene confianza: "ay doña X, yo no le quería decir, no le diga a nadie, soy lesbiana" Ayyyyy eso esta en el pasado ahora llegamos y le decimos "ay doña X qué guapa viene hoy, a ver qué dia me deja que la invite a pasear." Vaya, qué diferencia, ya no seamos homosexuales vergonzantes, si verdaderamente creemos en la igualdad de derechos somos tan valiosas como cualquier mujer heterosexual. De hecho somos idénticamente valiosas la una y la otra. Hagamos una comunidad de YOS bien plantados en el piso. Arriba el arcoiris y la diversidad, arriba el derecho del ciudadano a la intimidad libre y soberana, porque dicen por ahí que la piel es la frontera del cuerpo, y que cada cuerpo es libre y soberano de hacer con él lo que le plazca. Que cada quién ponga el ombligo donde le plazca y que las relaciones florescan y formen seres fantásticos como nosotras.
Para las ´mujeres es extraño esto del YO porque hemos sido condenadas durante siglos a ser la señora de... la hija de... la hermana de... teníamos que depender de un hombre para poder participar en la sociedad. Nos trataban peor que a un menor de edad que ha sido abusado sexualmente toda su vida. Porque eso si, no seríamos nadie pero a la hora de la noche si nos tocaba abrir las piernas, quisiéramos o no. Eso se acabó, nosotras seremos esclavas de nuestras pasiones, pero de nadie más. No se dejen abusar, no se dejen chantajear, no se dejen amedrentar por nada ni por nadie, si bien las religiones en su mayoría condenan la homosexualidad como un pecado mortal, también otorgan el perdón de los pecados así que poco importan nuestras culpas, lo importante es que vivimos vidas plenas tanto física como emocional como espiritualmente somos seres completos y funcionales, activando economías y sociedades. Ese es nuestro YO, siempre singular formando un gran plural.
De tarea les suplico que se vean al espejo y digan con todo el orgullo que les quepa: Esta soy YO.
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